Rama Navami: El advenimiento de Sri Ramacandra

¿Quién es el Señor Ramacandra?

El Señor se manifiesta en múltiples formas y periódicamente desciende personalmente a la Tierra para restablecer los principios espirituales eternos. Este jueves 30 de Marzo celebramos la aparición del Señor Ramacandra, uno de los más conocidos Avatares de Dios en la cultura védica.

En el libro épico Ramayana cuenta su historia. Ramacandra apareció en el poblado de Ayodhya, India. Su familia pertenecía a la orden real y su hermano menor era Laksman. Ambos son Krishna y su hermano Balarama, respectivamente, pero estos aparecieron en la Tierra en una época anterior. De hecho, Krishna y Balarama hacían obras teatrales junto a sus amigos, imitando las actividades de Ramacandra y Laksman.

Tiempo después de que Rama se casara con su única esposa, Sita Devi, fue exiliado del reinado de su padre, por lo que tuvo que salir de su hogar. Tanto Su hermano como Su esposa quisieron acompañarle.

Muchas cosas sucedieron en los años de exilio, pero lo más resaltante fue el rapto de Sita, la esposa de Ramacandra, a manos de un poderoso demonio llamado Ravana. Es por ello que Rama tuvo que prepararse a pelear para rescatar a su esposa. Su hermano fue fiel sirviente, al igual que el ejército de monos que le ayudó, donde resaltaba el gran y poderoso Hanuman.

Durante Su vida, Sri Ramacandra expuso con su ejemplo el comportamiento de un esposo, rey y sirviente perfecto, siempre preocupado de la protección y bienestar de quienes le rodeaban.

Al final de este artículo, te dejaremos un link de una película de animé basada en la vida de esta encarnación de Krishna.

Oraciones de Hanuman

Además del Ramayana, hay otros textos Védicos que relatan la historia del Señor Rama. A continuación expondremos versos del Srimad Bhagavatam, canto 5, capítulo 19, en donde Hanuman, el fiel sirviente del Señor, le ofrece sus oraciones:

Text 3: Que Tu Señoría Se sienta complacido con mi canto del bīja-mantra oṁkāra*. Deseo ofrecer respetuosas reverencias a la Personalidad de Dios, el más grande entre las personalidades más elevadas. Tu Señoría es el receptáculo de todas las buenas cualidades de los āryas, las personas avanzadas. Tu carácter y Tu comportamiento son siempre coherentes; Tus sentidos y Tu mente están siempre bajo control. Actuando como un ser humano corriente, manifiestas un carácter ejemplar para enseñar a los demás el modo de comportarse. Existe una piedra de toque que se emplea para evaluar la calidad del oro, pero Tú eres como una piedra de toque que sirves de referencia para todas las buenas cualidades. Tú recibes la adoración de los brāhmaṇas** más sobresalientes de entre todos los devotos. Tú, la Persona Suprema, eres el rey de reyes. Por todo ello, Te ofrezco respetuosas reverencias.

*El bīja-mantra oṁkāra es un mantra de invocación y adoración a Dios.
**Los brāhmaṇas son los sacerdotes en la cultura védica.

Text 4: El Señor, cuya forma pura [sac-cid-ānanda-vigraha] está libre de la contaminación de las modalidades de la naturaleza material*, puede ser percibido mediante la conciencia pura. En el Vedānta** se Le describe como aquel que no tiene igual. Debido a Su potencia espiritual, la contaminación de la naturaleza material no Le toca y como no está expuesto a la visión material, se dice que es trascendental. Él no realiza actividades materiales, ni tiene forma o nombre materiales. La forma trascendental del Señor solo se puede percibir en el estado de conciencia pura, conciencia de Kṛṣṇa. Establezcámonos firmemente en los pies de loto del Señor Rāmacandra, y ofrezcámosles respetuosas reverencias.

*Las modalidades de la naturaleza material son las energías que gobiernan este mundo y al mismo tiempo nos aprisionan y no nos permiten ver el aspecto espiritual de la vida en su estado puro.
**El Vedanta es el conocimiento Védico, que comprende todas las ciencias y artes de este mundo, pero especialmente profundiza en detalle el conocimiento espiritual.

Text 5: Se había establecido que Rāvaṇa*, el príncipe de los rākṣasas, solo podía morir a manos de un hombre; por esa razón, el Señor Rāmacandra, la Suprema Personalidad de Dios, apareció en la forma de un ser humano. Su misión, sin embargo, no se limitaba a matar a Rāvaṇa; vino también para enseñar a los mortales que la felicidad material centrada en la vida sexual o en la propia esposa es causa de muchos sufrimientos. Él es la Suprema Personalidad de Dios autosuficiente, y para Él nada es digno de lamentación. ¿Qué otra razón podía tener para exponerse a las dificultades que siguieron al rapto de madre Sītā?

* Rāvaṇa era el enemigo de Rama, quién raptó a Sita Devi, su esposa.

 

Text 6: El Señor Śrī Rāmacandra no está apegado a nada de este mundo material, pues es la Suprema Personalidad de Dios, Vāsudeva. Él es la Superalma* a quien tanto aman todas las almas autorrealizadas, Su íntimo amigo. Él goza de plenitud en todo tipo de opulencias. Por eso, no es posible que sufriese por estar separado de Su esposa, ni que abandonase a Su esposa y a Lakṣmaṇa, Su hermano menor. Hubiera sido absolutamente imposible que Él abandonase a cualquiera de los dos.

* La Superalma es la presencia de Dios en nuestros corazones.

Text 7: Con el Supremo Señor Rāmacandra no se puede establecer una amistad basada en cualidades materiales, como el haber nacido en una familia aristocrática, la belleza personal, la elocuencia, una inteligencia aguda o pertenecer a una raza o nación superiores. Para hacer amistad con el Señor Śrī Rāmacandra no se requiere de ninguna de esas cualidades. De no ser así, ¿cómo es posible que nos haya aceptado como amigos a nosotros, habitantes incivilizados del bosque, que no venimos de cunas nobles y no poseemos belleza física ni sabemos hablar como caballeros? *

* Hanuman, quien está haciendo esta oración pertenecía a una raza de monos, por lo que está explicando que no importa cual sea nuestra apariencia o cualidad, cualquiera puede acercarse a Dios.

Text 8: Por lo tanto, no importa si somos semidioses o demonios, hombres o criaturas de otro tipo, como animales o aves: todos debemos adorar al Señor Rāmacandra, la Suprema Personalidad de Dios, que aparece en la Tierra con forma humana. Para adorar al Señor no se necesitan grandes austeridades ni penitencias, pues Él acepta el servicio del devoto y Se satisface con ese servicio, por insignificante que sea. Esa satisfacción del Señor es el éxito del devoto. En verdad, el Señor Śrī Rāmacandra llevó a todos los devotos de Ayodhyā de regreso al hogar, de vuelta a Dios [Vaikuṇṭha].

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver arriba